Los ingenieros informáticos Alan Karpovsky, José Galindo, y Cristian Pereyra son los fundadores de Herolens, una startup que personaliza comunicaciones dinámicas y que encontró su mercado.
En tan sólo un año y medio de vida, Herolens se embarcó en una carrera maratónica: no sólo abrió su propia oficina, sino que emplea a 10 profesionales, cuenta con representaciones en México y Colombia y pronto se expandirá a Chile y Brasil.
La historia detrás de estos logros tiene tintes comunes con otras. José Galindo, Alan Karpovsky y Cristian Pereyra son quienes le dieron forma a esta plataforma que, a partir de distintos tipos de datos y variables –algunos inherentes al usuario, otros establecidos por el cliente y por el contexto-, desarrolla comunicaciones dinámicas personalizadas.
“Somos tres ingenieros informáticos del ITBA muy amigos entre sí que hicimos la carrera y el proyecto final juntos. Cuando nos graduamos comenzamos a trabajar en diversas startups tecnológicas, cada uno tenía un rol importante en su trabajo y aprendimos mucho. Pero decidimos que era tiempo de lanzarnos a la pileta con un proyecto propio. Renunciamos sin tener una idea bien definida de en qué queríamos emprender”, comenta Alan Karpovsky.
En una coyuntura donde el marketing online resulta clave, Herolens pudo en tiempo récord entender la lógica del mercado y gestar una cartera de clientes que incluye desde compañías de e-commerce y entes gubernamentales, hasta agencias de viajes online. Además, se sumaron al proyecto Matias Charas y Mariano Burstein, dos veteranos de la industria del marketing online y fundadores de Adfunky, una de las primeras Ad Networks (mayorista de medios digitales).
José Galindo, quien además se desempeña como Jefe de Trabajos Prácticos en la materia “Redes de Información”, explica algunos pormenores básicos de la labor de su compañía: “Ya que utilizamos muchas variables y se tienen que tomar decisiones en momento real, nos basamos no sólo en algoritmos complejos, sino también en herramientas como big data y machine learning, con el fin de alcanzar los mejores resultados”.
Para Alan, por ejemplo, el paso por el instituto resultó fundamental por distintos motivos. “El ITBA te enseña a resolver problemas complejos de formas creativas, a ver por fuera de la caja. Además, los tres que formamos la empresa pasamos por distintas actividades extracurriculares. Yo fui parte de Club Trama, me sirvió como trampolín para generar una network muy rica a nivel humano y en cuanto a contactos. Mientras que José y Cristian pasaron por el SABF y les fue de mucha ayuda”.
Consecuencia de su buen presente, Herolens tiene planeado expandirse en un futuro no tan lejano a Estados Unidos, Europa e Israel. “La mitad de nuestros empleados son del ITBA. Estamos buscando ampliar el equipo y nos llegaron un montón de currículums por la bolsa de graduados y la del Campus. Tenemos varios puestos que pueden ser ocupados por alumnos de la Licenciatura en Administración y Sistemas e Ingeniería Industrial”, concluye José Galindo.