En su primera edición, el Ciclo de Reflexión y Diálogo contó con Facundo Manes como orador. El neurocientífico analizó la realidad argentina. “Hay que invertir en el cerebro de las personas”, expresó.
Con un aula magna colmada, el Ing. José Luis Roces presentó el Ciclo de Reflexión y Diálogo, una iniciativa ideada en el marco del 60 Aniversario para acercarle a la comunidad ITBA distintas concepciones y maneras de entender la realidad y los sucesos que acontecen.
“Las vivencias de los sesenta años de la Universidad reclamaban un compromiso reflexivo, es por eso que decidimos desarrollar este espacio”, subrayó el Rector.
Facundo Manes inauguró esta serie de encuentros con la charla “Pensar la Argentina”. “Actualmente como país estamos atrapados en la coyuntura, como neurólogo diría que estamos deprimidos. No tenemos un sueño colectivo, estamos atrapados en la dimensión del presente”, destacó en primera instancia.
La coyuntura actual fue uno de los temas centrales de su exposición. Manes hizo referencia al dualismo que generalmente divide a la sociedad argentina. “Nos sentimos racionales, lógicos y analíticos. Lo somos, aunque la mayor parte del día estamos atrapados en esquemas mentales que creamos en función de lo que vivimos. Vamos por la vida básicamente tomando lo que coincide con nuestros esquemas, e ignorando lo que no. Buscamos gente que piense como nosotros. Esto es evidente en nuestra realidad: no escuchamos a los demás, sólo pensamos en qué responderle al otro sin tomarnos el trabajo en reflexionar sobre sus argumentos”.
El reconocido neurocientífico hizo hincapié en la importancia de la educación para encontrar respuestas productivas. “De esta coyuntura se sale con empatía y generando un sueño colectivo. Y hoy en día, el sueño colectivo se promueve con conocimiento, y todos los que están presentes acá son importantes para lograrlo. Esta institución es un pequeño modelo del país al que debemos aspirar”.
En esta línea agregó que el crecimiento real de Argentina necesita de “inversión en salud, como también de vincular a la ciencia y tecnología con el sistema productivo.” “Hay que invertir en el cerebro de las personas. Hoy en día estamos lejos de que el conocimiento impacte en la economía. Se cree en crecer económicamente y después invertir en salud y en educación, y en realidad debe ser al revés. Si no invertimos en la gente, el crecimiento económico puede generar más desigualdad. Si realmente se hiciera podríamos duplicar el PBI en una década y lograríamos una sociedad más inclusiva”, concluyó Manes.
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