Por primera vez, dos alumnos de Ingeniería en Petróleo del ITBA participaron del Summer Camp de Texas Tech University. Un repaso por una experiencia de crecimiento profesional.
A fines de febrero de 2017, Matías Urio y Agustín Garbino recibieron un mail por parte del Departamento de Ingeniería en Petróleo. El correo era en realidad una invitación para ser parte del “Research Experience for Undergraduate Students”, un programa impulsado por Texas Tech University con el fin de promover proyectos de investigación de alumnos avanzados de distintas carreras de ingeniería. La propuesta incluía una estadía de dos meses en el campus de la Universidad entre junio y julio, bajo el compromiso de efectuar un trabajo de investigación que contaría con la supervisión de un tutor.
“No sólo fuimos los primeros representantes del ITBA en la historia del programa, sino que también los primeros estudiantes de ingeniería en petróleo del mismo. Nunca antes se habían incluido proyectos de investigación sobre esta especialidad hasta este año y tuvimos el privilegio de ser quienes lo pusieron en práctica”, remarcó Urio.
El estudio se centró en mediciones de diferentes propiedades de rocas provenientes de distintas formaciones shale de Estados Unidos. Y, una vez finalizada la investigación, debieron realizar un reporte y presentarlo a profesores y estudiantes de doctorado de Universidad.
“Desde lo técnico este programa nos permitió conocer desde adentro el ámbito de la investigación en la industria petrolera, y nos dio acceso al uso de metodologías de medición y herramientas sumamente sofisticadas. También nos permitió estar en el día a día con alumnos que se encuentran desarrollando un doctorado, por lo cual pudimos indagar sobre cómo es la vida y cuáles son las responsabilidades de un estudiante de doctorado en una universidad como esta””, agregó Agustín Garbino.
Además de las cuestiones académicas, el Summer Camp fue una oportunidad para vivenciar una realidad diferente. Los dos protagonistas concuerdan: “La universidad se encontraba en Lubbock, una ciudad de unos 250.000 habitantes en el noroeste de Texas. Durante la semana pasábamos la mayor parte del tiempo en el campus y aprovechábamos los fines de semana para salir a pasear. En general utilizábamos el tiempo libre para realizar distintas actividades con el resto de los participantes del programa, especialmente en las instalaciones del campus, que contaba con una pileta impresionante y varios sectores deportivos”.
Matías y Agustín, quienes se graduaron en diciembre como Ingenieros en Petróleo, insisten en la importancia de contar con una experiencia de este tipo. “Es absolutamente enriquecedora desde lo técnico y lo personal, pudimos generar lazos de amistad con personas de culturas diferentes. Es una oportunidad que quienes están interesados no deberían dejar pasar”.
+Mirá algunas de las fotos del “Research Experience for Undergraduate Students”.